La educación de tus hijos no tiene que ser una fuente de ansiedad y estrés constante.
La educación de tus hijos no tiene que ser una fuente de ansiedad y estrés constante.
Es hora de cambiar de
Estoy muy seguro, que si llegaste a esta página es porque te sentís abrumado por el estrés de educar a tus hijos, pero no tiene que ser así.
Imagínate esto: Es una tarde tranquila y estás sentado en el sofá, viendo a tus hijos estudiar con una sonrisa en el rostro. No hay gritos, no hay estrés, solo un ambiente de aprendizaje pacífico y de alegría. ¿Suena como un sueño, no?
Así pensaba yo también cuando me estrené como padre y como docente. Sin embargo, con el tiempo, me di cuenta de que acababa agotado, estresado, y, lo peor, sentía que estaba fallando a mis hijos.
La verdad es que no saber a dónde ir puede ser abrumador.
Desde niño, siempre tuve la pasión de ser docente.
Con el tiempo, mi dedicación a la educación se expandió a apoyar a colegios y a cientos de familias homeschoolers en todo el mundo, proporcionando herramientas y conocimientos basados en los principios de la educación clásica.
Hoy puedo afirmar con certeza que sí, es posible educar desde el descanso.
Ahora, quiero compartir contigo todo lo que ha aprendido para que también puedas disfrutar de una educación desde el descanso.
Te invito a nuestro evento "Educando desde el descanso", donde aprenderás cómo transformar la educación de tus hijos.
Estamos aquí para mostrarte que la educación no tiene que ser una fuente de ansiedad.
Soy abogado y padre de ocho hijos. Mi viaje educativo comenzó en Thomas Aquinas College (California, USA), donde fui el primer argentino graduado, marcando el inicio de una aventura singular.
De regreso en Buenos Aires, dirigí un proyecto educativo para niños de edades primarias y secundarias, aplicando principios de la educación clásica y transformando la manera en que estos jóvenes veían el aprendizaje.
Hoy, dedico mi vida a apoyar colegios y cientos de familias homeschoolers en todo el mundo. Mi misión es proporcionarles las herramientas y el conocimiento necesarios para educar a sus hijos de acuerdo con los principios de la educación clásica, asegurando que cada niño pueda desarrollar su máximo potencial.
Mi objetivo no es solo que los niños reciban una educación excelente, sino también que las familias comprendan que la educación clásica es un camino para vivir plenamente y en armonía con el conocimiento y la virtud. Al emprender este viaje juntos, descubrimos que el verdadero aprendizaje es una aventura que enriquece nuestras vidas y las de nuestros hijos de manera profunda y duradera.
Mi misión va más allá de la educación; es inspirar a las familias a vivir en armonía con lo Bueno, Bello y Verdadero.